El sitio arqueológico Cacaxtla-Xochitécatl es uno de los más interesantes y únicos de todo México. Aparte de sus estructuras masivas y sus impresionantes vistas hermosas, esta antigua ciudad en el centro de México cuenta con una característica bastante fuera de lugar: los murales mayas.

Aunque cada uno tiene su propia entrada, para todos los efectos, Cacaxtla y Xochitécatl eran parte del mismo centro ceremonial tlaxcaletco. Por este hecho, y por simplicidad, de aquí en adelante nos referiremos a la ciudad antigua simplemente como Cacaxtla.

El sitio arqueológico de Cacaxtla está ubicado al sur del estado de Tlaxcala, en el municipio de Natívitas, y enclavado dentro del valle Puebla-Tlaxcala.

Poco se sabe sobre la fundación de Cacaxtla, incluida la fecha precisa de su fundación, que probablemente fue en el siglo V d.C. El nombre Cacaxtla proviene de la palabra náhuatl cacaxtli, haciendo referencia a las grandes cestas que utilizan los comerciantes para transportar mercancías.

Se ha especulado ampliamente que Cacaxtla pudo haber sido establecido por pueblos mayas u olmecas, desplazados de sus propias ciudades lejanas. Como veremos más adelante, esta hipótesis tiene bastante sentido a la hora de analizar el arte y la arquitectura de la ciudad, pero por lo demás no tiene datos que la respalden. Dicho esto, existe buena evidencia de la existencia de asentamientos mayas en el centro de México, como es el ejemplo de los barrios mayas en Teotihuacán.

Tras la caída de Cacaxtla, la región quedaría dominada por la civilización tlaxcaleteca, que seguiría siendo una espina clavada en el costado del poderoso imperio azteca hasta su conquista por España. Quizás, por eso, todavía existe cierto grado de resentimiento histórico contra el moderno estado de Tlaxcala. Este resentimiento a menudo se manifiesta minimizándolo o burlándose de su pequeño tamaño, o negando su existencia en broma por completo.

El sitio arqueológico fue redescubierto en 1975 por agricultores de la cercana ciudad de San Miguel del Milagro, quienes comenzaron a encontrar artefactos en las áreas que rodeaban los montículos de las tierras de pastoreo.
Fuente: Revista Yucatán
Puesto de Tlaxcala