A través de una publicación en Twitter, Jon Benjamin, embajador británico en México, lamentó que su reciente visita a Mérida y comunidades cercanas en Yucatán terminó con él y su familia hospitalizados presuntamente por intoxicación alimentaria.
Según su publicación en redes sociales, él y su familia terminaron hospitalizados luego de comer en un restaurante de Paseo de Montejo, sin embargo, no reveló el nombre del establecimiento.
“Después de visitar #Mérida y sus alrededores en #Yucatán, lamentablemente ahora me encuentro en un hospital de la #CDMX por un caso grave de intoxicación alimentaria que sufrió toda mi familia luego de comer en un restaurante de Paseo de Montejo. ¡Ojalá seamos mejores pronto!”, escribió.
En respuesta, la secretaria de Turismo Michelle Fridman pidió detalles del caso para iniciar una investigación sobre las medidas sanitarias en el establecimiento. “Embajador, lamento leer esta noticia, le ruego nos haga saber lo sucedido para tomar las medidas necesarias. @YucatanTurismo es y debe seguir siendo un destino referente por su calidad y seguridad, en todos los aspectos, para nuestros visitantes. Te deseo una rápida recuperación «.

Sin embargo, la secretaria no tardó en recibir críticas de los usuarios, quienes consideraron este un trato especial hacia la embajadora británica y dijeron que todos los turistas que tienen una mala experiencia en Yucatán también merecen el mismo trato.
El 11 de abril, el embajador británico en México, Jon Benjamin, compartió imágenes de su estadía en Yucatán, que incluyó paradas en la Ría de Celestún e Izamal; además de las fotografías “obligatorias” en céntricos albergues turísticos de Mérida, como la Plaza Grande y la plaza Santa Lucía.
En sus publicaciones, el embajador se mostró visiblemente emocionado y feliz de poder disfrutar de unas vacaciones en familia en el estado. Cabe aclarar que se desconoce si el embajador llegó como turista o por compromisos políticos, aunque el hecho de que hiciera el viaje con su familia parece indicar que se trató de unas vacaciones familiares.
A juzgar por las imágenes, el embajador británico disfrutó mucho de su estadía y aunque terminó teniendo una experiencia difícil, su sonrisa desde el hospital sugeriría que no se arrepiente de su visita a la “Ciudad Blanca”.

Fuente: El Diario de Yucatán
El Correo de Yucatán